Reseña de “Indiana Jones y el Dial del Destino”: ¿Qué más quieren de Harrison Ford?

Definitivamente, la taquilla que está teniendo Indiana Jones y El Dial del Destino no es reflejo de la calidad de película que yo disfruté en el cine (130.5 millones de dólares a nivel mundia, según Box Office Mojo al momento de publicación de este artículo). Cosa que inevitablemente me hace preguntarme, ¿qué es lo que está esperando ver la audiencia cuando va a ver una película de Indiana Jones protagonizada por Harrison Ford a sus 80 años de edad? Como ya lo he comentado en otras ocasiones, muchas personas están evaluando las películas por lo que se imaginan que pudieron ser y no por lo que en realidad son. Esta quinta entrega en mi opinión es mucho mejor que la cuarta, reanimando el estilo de aventura y acción característica de esta saga que inició hace 42 años. A continuación mis impresiones de esta película (advertencia de spoilers).

Harrison Ford está de regreso y el forma

Lo más admirable de esta película, sin lugar a dudas, es la voluntad de Harrison Ford en regresar a portar el látigo y su sombrero aún con 80 años. Vemos al actor en muy buen estado físico e incluso realizando algunas escenas montando a caballo. El humor y la chispa del personaje de Indy ha envejecido muy bien con los años, y el director James Mangold supo encontrar para el arqueólogo aventurero nuevas motivaciones que se ajustaran a su edad avanzada.

Nadie extrañará al hijo de Jones

Una de las preguntas que muchos se habrán hecho es, ¿qué ocurrirá con el hijo de Indiana Jones? Al que vimos por última vez en “Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal” en 2008, interpretado por Shia LaBeouf.

Según nos exponen en la película, el destino de Mutt William (cuyo nombre real dentro de la historia es Henry Walton Jones III), hijo de Indiana Jones junto a Marion Ravenwood, fue el de morir en batalla luego de alistarse en el ejército. Una pena que causó la destrucción del matrimonio de Indy con Marion y que dentro de la trama, se ajusta a la perfección para darnos a entender que Indy se encuentra severamente deprimido y a punto de retirarse para vivir solo en un apartamento.

La presentación de Helena y Teddy

El duo de Helena y Teddy nos recuerda a la química que existía entre Indy y su fiel amigo Tapón interpretado por el actor Ke Huy Quan en “Indiana Jones y el Templo de la Perdición” en 1984. En mi opinión no se siente para nada que la participación de Phoebe Waller-Bridge como Helena en la película desplace el foco del rol de Indy en la historia. Obviamente, ella está allí para aportar el drama más irreverente y la pasión que no puede tener un hombre de 80 años que ya se ha casado, se ha divorciado y ha experimentado la muerte de un hijo.

Ver también: Personajes de “Indiana Jones y El Dial del Destino”

Tampoco llegué a sentir que el personaje de Helena haya sido presentado como la búsqueda de un personaje para darle continuidad a la saga. Puedo estar equivocado, pero no me dio esa impresión ya que no desarrollan demasiado la historia de Helena más allá de lo relativo al Dial del Destino.

¿Por qué la Indiana Jones y el Dial del Destino no está teniendo el éxito esperado?

Luego de ver la película escuché a alguien comentando mientras salía de la sala “Más de lo mismo…”, con lo que no pude evitar preguntarme a mí mismo, ¿qué esperan ver las personas de una quinta entrega de Indiana Jones con Ford de 80 años regresando al rol principal? Me resulta obvio que es una película que traerá elementos nostálgicos a la trama, y de verdad que lo hace espléndidamente.

Yo disfruté mucho más las escenas de persecuciones y acción de Indiana Jones y el Dial del Destino que las de Rápidos y Furiosos X. La película sabe retomar muy bien esa esencia de coreografías de acción en la que los protagonistas “juegan” con los elementos del entorno a su favor, con mecánicas físicas sencillas, incluso batallando con vehículos convencionales sin nada especial ni a altas velocidades. La adrenalina y el buen humor irrevenrente característicos de esta franquicia están presentes y al día como si no hubiesen pasado 42 años.

Así que si tuviese que dar una explicación a la baja taquilla que ha recibido la película, lo atribuiría a que ya las audiencias no saben para qué van al cine… Quieren que cada película les haga descubrir algo novedoso que nunca hayan visto, pero la verdad es que no todas las historias están hechas para ser así. Muchas son aventuras con móviles orgánicos y explorando circunstancias comunes, pero a través de los ojos de nuevos personajes o de versiones evolucionadas de los personajes que ya hemos conocido.

Al fin y al cabo, ¿qué más pueden perdirte a Harrison Ford?

Un final feliz para Indy

Muchas personas se han estado quejando de que este ha sido un cierre decepcionante para el arqueólogo aventurero. Nada más lejos de la realidad en mi opinión. Me parece que Indy merecía su final feliz y en esta quinta entrega lo ha obtenido. De hecho, al final toma su sombrero… lo que podría sugerirnos que quizá Indy pueda hacer alguna otra aparición así sea en una precuela o spinoff.

Algunas críticas dicen que el personaje ha perdido su chispa y que luce cansado. Pues supongo que a esas personas se les olvida que se trata de un arqueólogo deprimido en la tercera edad de su vida, e interpretado por un hombre de 80 años, quien lógicamente ya también ha madurado mucho más en su forma de actuar. Es un poco tonto pensar que vamos a ver a un Indiana Jones en su tercera edad que se comporte igual al Indy de 40 años, eso sería algo antinatural, todos cambiamos, incluso de una década a otra, ya nos comportamos de manera diferente. ¿Por qué no habría de ocurrir lo mismo con nuestros héroes? Al menos, mientras sigan siendo humanos.

En conclusión, sólo me queda decir que a mí me ha encantado la película, así como a un 88% de la audiencia que la ha ido a ver al cine según reporta Rotten Tomatoes. Grandes y chicos pueden disfrutar de esta aventura que bien podría ser la última del querido personaje al que ha dado vida Harrison Ford desde 1981.