Reseña del thriller psicológico “No te preocupes cariño” con Florence Pugh, Harry Styles y Chris Pine

“No te preocupes cariño”, titulada en inglés “Don’t worry darling”, es un thiller psicológico basado en una historia escrita por Carey van Dyke, Shane Van Dyke y Katie Silberman, con guion de Silberman y dirigida por Olivia Wilde. La película es protagonizada por Florence Pugh, Harry Styles, Chris Pine junto a la misma Wilde. A continuación, mis impresiones de esta cinta que podría ser considerada una película de culto (advertencia de spoilers).

El terror psicológico feminista

La trama de “No te preocupes cariño” nos recuerda a películas como The Matrix y The Truman Show, o como la reciente serie de Marvel Studios, WandaVision. Es una historia que describe una aventura en un mundo virtual, en donde cada hombre puede llevar una vida “como la desea” junto a su esposa, en una sociedad ambientada en la década de 1950.

Vale la pena recalcar el hecho que este mundo “perfecto” virtual parece ser más que todo hecho para hombres, ya que la vida que todos los miembros de esta comunidad se basa en el concepto machista en el cual el hombre se convierte en proveedor del hogar y la mujer en la ama de casa dedicada que no debe hacer más que atender y cuidar a su esposo, sin tener mayores ambiciones.

Los hombres de esta utopia machista deben trabajar en el proyecto clasificado llamado Victoria, que no es más que la excusa que tienen para salir al mundo real a ocuparse de que sus necesidades biológicas estén satisfechas, trabajar para pagar la membresía del proyecto, así como también conservar a sus esposas secuestradas para que permanezcan dentro de este mundo de ilusión.

Alice poco a poco logra ver “qué tan profundo es el agujero del conejo”… Descubriendo todo el engaño al que ha sido sometida en contra de su voluntad. Luego de vivir duros momentos de estrés, terror y paranoia, Alice finalmente enfrenta a su esposo Jack (Harry Styles) y a su jefe Frank (Chris Pine). El proceso termina con Jack asesinado a manos de Alice y Frank asesinado a mano de su esposa Shelley (Gemma Chan), quien parece al final tomar el liderazgo del proyecto Victoria, con lo que podríamos llegar a pensar que este mundo machista podrá en un futuro tener un giro total y enfocarse en una perspectiva más igualitaria o quizá en una sociedad feminista bajo el mando de Shelley.

Todos los hombres son villanos

La historia puede llegar a ser entretenida, e incluso tener un giro hasta cierto punto impredecible para las audiencias más jóvenes. Pero el hecho que la trama carece por completo de personajes masculinos que no sean maliciosos, deja claro que la cinta proyecta de forma intrínseca ese mensaje que muchas feministas radicales predican en contra un patriarcado en donde “todos los hombres de la sociedad son villanos”.

Esto le resta mucho potencial a la historia, ya que se pudo explorar mucho más de la psiquis humana si por ejemplo hubiesen mostrado matrimonios en los que fuese la mujer quien mantuviese secuestrado a su pareja y fuese ella quien trabajara en el proyecto secreto. Incluso, pudo haber mayor inclusión de la comunidad LGBT+ en una trama como esta que involucra una realidad alternativa. Por supuesto, todo esto habría implicado cambios en la historia original escrita por Carey van Dyke, Shane Van Dyke y Katie Silberman.

En conclusión, “No te preocupes cariño” es un thriller psicológico que podría convertirse en una película de culto que haga referencia a ese movimiento feminista que ha estado manifestándose en los últimos año, así como también podría continuar como una saga en la que quizá aprovechen de explorar esas otras perspectivas de mundos virtuales posibles más diversos, en el que no exista un género en particular como villano.

La cinta es recomendada para todos los fanáticos de la ciencia ficción que disfruten de todas estas historias derivadas de la creación de una realidad alterna en donde pueden aflorar “sin consecuencias” los deseos más perversos del ser humano.

Por último, vale la pena descatar la interpretación de Florence Pugh, quien logra demostrar que no sólo está preparada para roles de exigencia física como en Black Widow, también puede profundizar en personajes con dilemas psicológicos profundos y proyectar todas estas emociones fuertes en la pantalla. Por otra parte, en contraposición, la actuación de Harry Styles es muy superficial y no logra proyectar todo lo que su personaje debería como el villano principal de la historia, quedando muy por debajo de la interpretación del veterano Chris Pine, quien como villano le roba el protagonismo a Styles aún con menos tiempo de exposición y menos líneas del guion.