Opinión de “Aquaman y el Reino Perdido”: Una comedia de acción entretenida

La última película del Universo Extendido de DC (UEDC) que inición con Zack Snyder ya ha sido estrenada. Se trata de “Aquaman y el Reino Perdido”, protagonizada por Jason Momoa, Patrick Wilson, Yahya Abdul-Mateen II y Amber Heard, bajo la dirección de James Wan, con una historia coescrita por Wan, David Leslie Johnson-McGoldrick, Thomas Pa’a Sibbett, y junto al mismo Momoa. A continuación, mis impresiones sin spoilers de la película.

Reinicio del Universo DC mantiene baja la taquilla

No es de extrañarse que desde que James Gunn anunció el reinicio del Universo DC todas las películas del UEDC hayan mantenido una baja taquilla, ya que la audiencia encuentra poco interés en ir al cine a ver historias que no tienen ningún tipo de consecuencias a futuro en las siguientes películas en desarrollo bajo el liderazgo de Gunn. En ese sentido, Aquaman y el Reino Perdido ha sido otra víctima de este reinicio precozmente anunciado del Universo DC, al igual que The Flash.

A pesar de ello, esta segunda entrega de Aquaman a recaudado unos 120 millones de dólares tras su primer fin de semana de estreno, según Box Office Mojo, y ha obtenido una calificación de la audiencia en Rotten Tomatoes del 79%, sin embargo, la crítica apenas apoya la película con un 36%.

Una película entretenida sin mayores ambiciones

Esta diferencia tan grande entre la evaluación de los críticos y la audiencia básicamente se debe a que Aquaman 2 es una película de acción y comedia entretenida, que mezcla el género de “colegas en apuros” (típico de películas policiales), junto con odiseas fantásticas de ciencia ficción como Star Wars e incluso míticas historias como las del Señor de los Anillos.

Se puede apreciar como James Wan hace guiños a luchas de naves espaciales que nos recuerdas a momentos épicos de Star Wars, así como un encuentro de los protagonistas junto a un pirata que es el vivo retrato de una visitar de Han Solo y Luke Skywalker a Jabba de Hunt.

Wan no tomó riesgos y se aferró a fórmulas que ya han funcionado en el pasado. Incluso la historia de un rey corrompido por el poder de un tridente mágico nos recuerda mucho al mítico anillo de la famosa saga escrita por Tolkien.

Black Manta regresa pero sin brillo propio

Se agradece el regreso de Yahya Abdul-Mateen II como Black Manta, ya que habíamos visto muy poco de este importante villano. Aún así, no es el mimos Black Manta quien destaca, ya que realmente está siendo “poseído” por un ente mágico que le otorga poderes que le permite enfrentar en igualdad de condiciones físicas a Aquaman y a su hermano Orm.

El precio a pagar, es que el villano no tiene realmente un plan maestro para vencer a Aquaman por sus propios medios, sino que está siguiendo la voluntad del villano principal, del cual no llegamos a ver muchas escenas en acción, más allá de las que nos explican su origen.

En conclusión, Aquaman y El Reino Perdido es una película disfrutable como una comedia de acción, pero que carece de mayores ambiciones, ya que no da pie para ninguna nueva historia por contar. La cinta cuenta con una escena postcréditos que es protagonizada por Orm como un chiste de cierre, pero que no deja nada más que eso. Afortunadamente, el hate hacia Amber Heard tras el juicio que perdió en contra de Johnny Depp en el que lo acusaba de maltrato doméstico, no parece estar afectando la taquilla de la película. El presupuesto de esta estrega se dice que estuvo alrededor de los 205 millones de dólares, así que es posible que Warner Bros pueda al menos recuperar lo invertido sin pretender tener un gran margen de ganancia.