Reseña de Wicked: Ya esperando su segunda parte

La esperada adaptación del icónico musical Wicked es un espectáculo que no decepciona. Dirigida por Jon M. Chu, esta primera parte logra captar la esencia mágica del mundo de Oz, con una historia llena de emociones y mensajes significativos. Aunque dura casi tres horas, el tiempo pasa rápido gracias a su buen ritmo y canciones que mezclan emoción y entretenimiento de principio a fin.
Las actuaciones son sobresalientes. Destacando a Ariana Grande quien interpreta a Glinda con frescura y carisma, dándole vida a un personaje encantador y lleno de energía. Por otro lado, Cynthia Erivo brilla como Elphaba, mostrando una actuación emotiva y una voz impresionante que transmite perfectamente la lucha interna de su personaje, quien busca encontrar su lugar en un mundo que no la acepta por ser diferente.
Más allá de ser un cuento fantástico, Wicked aborda temas profundos como la exclusión social, la justicia y el valor de la amistad. Elphaba se convierte en un símbolo de resistencia al enfrentarse a la dictadura del Mago de Oz, mientras que su relación con Glinda, a pesar de sus enormes diferencias, es conmovedora dónde ambas logran superar los prejuicios y las barreras.
Visualmente, la película es impresionante. Los paisajes de Oz y los números musicales están diseñados con gran detalle, sumergiendo al espectador en este mundo mágico. Las canciones están interpretadas con tanta pasión que emocionarán tanto a quienes ya son fans del musical como a quienes lo descubren por primera vez.
Wicked es una película que combina espectáculo y profundidad de manera brillante. Su mensaje de aceptación y fidelidad a nuestros valores, incluso frente a las adversidades, es tan poderoso como actual. Con actuaciones memorables, una dirección impecable y una historia que deja al público esperando ansioso la segunda parte, esta película es una experiencia que vale la pena disfrutar en la gran pantalla.